Izayana Marenco Vivas tenía 9 años, cuando le diagnosticaron autismo grado 1, obesidad, diábete juvenil e hipertención. El doctor recomendó a Cristian Vivas, mamá de la hoy atleta olímpica, que la pusiera a practicar un deporte, pero fue hasta los 12 años que logró entrar a Judo.
«Unos amigos que eran de la selección, me invitaron a practicar Judo y me enamoré de este deporte. En mi vida lo primero es el judo, segundo el judo y tercero el judo», dice sonriendo Marenco de 30 años.
Puede interesarle:Evidelia González Jarquín, competirá en Remo, en los Juegos Olímpicos París 2024
Izayana, superó con el deporte todos los problemas de salud y ahora es parte de la Selección Nacional de Judo y representará a Nicaragua por segunda vez en los Juegos Olímpicos. La primera fue en Tokio 2020 y ahora París 2024. La máxima representante del judo nicaragüense competirá en los +78kg.
Campeona Panaméricana
La última presea de Oro la ganó en junio recién pasado, en el Open Panamericano de Judo en Lima-Perú 2024. La consiguió derrotando a la atleta olímpica, Tahani Alqahtani de Arabia Saudita en los +78kg por la vía del ippon.
El Comité Olímpico Nicaragüense dio a conocer su clasificación el 27 de junio pasado, asegurando que la atleta olímpica se une a la delegación que representará a Nicaragua en las olimpiadas, el próximo 26 de julio.
«Me siento alegre, emocionada, ha sido un ciclo cansado, estresante, doloroso, pero el más satisfactorio que he tenido, después de Tokio 2020. Es un honor representar a mi país y quiero dar una mejor actuación que la de Tokio. Nicaragua sueña con una medalla olímpica y estoy enfocada en ganar combates y quedar entre las mejores del mundo. Actualmente estamos en la posición 72 del ranking mundial, es un logro para Nicaragua», detalló la atleta con 16 años en el deporte.
También puede leer:Mariel José López Pavón, atleta olímpica de Tiro, representará a Nicaragua en París 2024
El cupo de Marenco se obtuvo luego de aplicar a una plaza de universalidad, que fue posible gracias a su rendimiento en las competencias de este ciclo olímpico.
https://www.facebook.com/reel/1198163927891552
«Lo que más me gusta del Judo es el compañerismo. Mi entrenador y mis compañeros son el pilar de mi carrera deportiva. Me impulsan, pierda o gane, a seguir adelante. Con el judo no solo estoy sana, sino que me ha impulsado a ser mejor en todo, me da confianza, es lo más maravilloso que me ha pasado en la vida», expresó la judoca.
Bióloga Marina
Izayana no solo se destaca en el deporte, también se graduó de Bióloga Marina en Bluefields Indian & Caribbean University (BICU), Alma Máter ubicada en el Caribe Norte de Nicaragua. «Tuve que vivir un tiempo en Bluefields, y no paré de entrenar. Para atrás ni para tomar impulso», dijo la atleta.
Ahora trabaja en el Departamento de Medio Ambiente de la Alcaldía de Ciudad Sandino, municipio donde vive junto a su mamá y su hermana menor.
El entrenamiento de Izayana inicia a las 4:30 de la mañana, sale a correr o bien realiza el ejercicio que su entrenador José María Lanuza, le indica un día antes, hasta las 5:30 am.
Luego, la atleta se va al trabajo y cuando sale a las 4:00 pm va directo al gimnasio, donde hace una hora ejercicio con pesas y después, de 6:00 pm a 7:30 pm tiene entrenamiento técnico-táctico con su entrenador y todos sus compañeros de la Selección Nacional de Judo.
«Practico con varones porque necesito más rudeza, fuerza y agilidad, porque mis oponentes son fuertes y muchas veces más grandes que yo, y debo usar otras estrategias», relata la mundialista.
Para culiminar este año 2024, la judoca se prepara para participar en diferentes eventos en azerbajian, Canadá y Tokyo-Japón. Además, participará en los Juegos Panamericanos a realizarse en octubre en Santiago de Chile.
Se retira del judo competitivo para ser mamá
Izayana expresó que las olimpiadas de París 2024, son las últimas en las que participará porque se retira del Judo competitivo, para vivir otro sueño: «Ser mamá».
«Después de estas olímpiadas me retiro del Judo competitivo. Mi ciclo deportivo ya topó aquí. Viví mi mejor etapa como deportista de alto rendimiento, ahora quiero vivir mi sueño como mamá. Cuando tomé la decisión de retirarme yo dije: quiero mis segundas olimpiadas. Voy a retirarme bien y aquí estoy. Espero no ser la última en llevar al judo nicaragüense a lo más alto y me propongo aportar, desde otra cancha», finalizó la judoca.