Una serie de incidentes desafortunados y cuestionados caracterizaron el partido entre el Real Estelí contra el Alajuelense de Costa Rica, este miércoles 27 de noviembre, que resultó en un empate 1-1, en el primer juego de la final de la Copa Centroamericana.
Ciertamente Bryan Ordoñez cometió uno de esos agarrones infantiles que no tienen razón de ser, cuando se juega una final en la que estás desbordando al contrario. El var le dio la razón al polémico árbitro hondureño, y penal a favor del Alajuela que ejecuta Celso Borges para el 1-1 en el 37.
Puede leer: Río Blanco desaprovecha localía
Por donde se grafique, es un empate muy polémico porque en la misma jugada de Ordoñez, hay primero un fuera de juego, en la que el árbitro da prioridad a la revisión de la falta de Ordoñez, y ese es punto donde se quiebra todo el Tren.
También puede interesarle: Duelo entre norteños y capitalinos
Y para el colmo del Tren, un balonazo a finales del segundo tiempo que se estrelló aparentemente en el brazo del defensor tico, ni siquiera fue sometida a revisión de var, lo que privó de un posible penal para los pinoleros.
Y no es que se haga leña del árbol caído, pero luego de la excelente asistencia de Byron Bonilla a Delys Vargas para el 1-0, y el gol de Borges al 37, el tren se desenfocó como si la falla de Ordoñez los desenchufara de ese dominio ante los ticos.
Para el segundo tiempo, el Alajuela no arriesgó, estuvo tranquilo con el 1-1, esperando alguna falla del Tren, mientras que los dirigidos por Otoniel Olivas, buscaban como generar peligro en una defensa que encontró en la doble marca y en el relevo defensivo frenar a Bonilla y Harold Medina.
La polémica en medios ticos y redes sociales es evidente, solo es asunto de dar un vistazo.
Lo cierto que los norteños, van a definir el título en el Morena Soto de Costa Rica, en la que un empate a 2, o un triunfo les daría el título.