Los sueños de Pío Armando Rodríguez y Francisco Olivas, agricultores del municipio de Pueblo Nuevo en Estelí, están creciendo más que nunca.
Ambos son parte del programa Tierra Fértil de Walmart, quien está construyendo dos modernos invernaderos, para que ambos productores cuenten con herramientas que transformarán su manera de cultivar y asegurar cosechas más estables y de mejor calidad.
Para ello, Walmart invertirá 4.5 millones de córdobas, para que estos invernaderos les permitan producir tomate criollo con tecnología de punta, reduciendo hasta en un 40% el uso de agroquímicos. Esto significa productos más saludables para las familias y menos riesgos para quienes trabajan la tierra día a día.
Puede leer: La Castellana produce ‘oro verde’ para walmart en Carazo
“Con esta inversión estamos apostando por el futuro del campo nicaragüense. Creemos firmemente en el potencial de nuestros productores y queremos que tengan acceso a herramientas que les permitan crecer de manera sostenible, asegurar sus cosechas y llevar, junto a nosotros a través de nuestras 105 tiendas, alimentos de calidad e inocuos a todas las familias del país”, expresó Richard Lugo, gerente sénior de Asuntos Corporativos de Walmart Nicaragua.
Puede interesarte: Cosechando éxitos con Walmart
Ejemplo de innovación
Pío y Francisco han dedicado su vida al campo, proveyendo tomates y hortalizas que terminan en la mesa de miles de nicaragüenses. Ahora, con este impulso, no solo podrán mejorar sus cosechas y su ingreso económico, sino también convertirse en un ejemplo de innovación agrícola en la región.
“Con estos invernaderos vamos a poder asegurar nuestra producción y garantizar hortalizas de calidad para las familias del país”, compartieron los agricultores, emocionados por el impacto que esta oportunidad tendrá en sus comunidades.
En un contexto donde plagas, el clima y los altos costos complican la labor de los pequeños productores, proyectos como este se convierten en un respiro y una esperanza para el campo nicaragüense.
Hoy, la historia de Pío y Francisco inspira a muchos otros agricultores a seguir apostando por la tierra, con la certeza de que el futuro del campo también se puede cosechar con innovación y trabajo en equipo.
