La Selección Nacional de Baloncesto de Nicaragua se prepara para uno de los desafíos más importantes de su historia: enfrentarse a la poderosa Selección de Estados Unidos el próximo 28 de noviembre, en el Polideportivo Alexis Argüello de Managua, como parte de los Clasificatorios de las Américas rumbo a la Copa Mundial FIBA 2027.
El compromiso marcará el inicio del camino de Nicaragua en esta exigente competencia, donde compartirá el Grupo A junto a Estados Unidos, México y República Dominicana, tres potencias con amplia experiencia internacional.
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Un reto que impulsa el crecimiento
Durante la conferencia de prensa realizada en Managua, la Federación Nicaragüense de Baloncesto (FENIBAL) confirmó los detalles del encuentro y destacó la oportunidad que representa este partido para medir el avance del baloncesto nacional.
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“Nicaragua formará parte del grupo junto a Estados Unidos, República Dominicana y México. Estamos trabajando para conformar el mejor plantel posible y competir con orgullo”, expresó César Fornos, vicepresidente de FENIBAL, durante el evento oficial.
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El entrenador David Rosario también subrayó que este tipo de enfrentamientos ayudan a fortalecer la mentalidad y la preparación técnica del grupo, señalando que el objetivo es aprovechar cada minuto en cancha frente a rivales de élite para continuar el proceso de crecimiento deportivo.
Ventajas y desventajas del duelo
Nicaragua ocupa actualmente el puesto número 77 del ranking mundial FIBA, mientras que Estados Unidos se mantiene como el número 1. Esta diferencia en jerarquía supone un reto considerable, pero también una oportunidad invaluable para el conjunto nacional.
Ventajas para Nicaragua:
- Juega en casa, con el apoyo del público en el Polideportivo Alexis Argüello.
- Motivación colectiva de representar al país ante una potencia mundial.
- Posibilidad de aprendizaje frente a jugadores de alto nivel técnico y físico.
Desventajas:
- Experiencia internacional limitada frente a un rival acostumbrado a competir en los escenarios más exigentes del baloncesto mundial.
- Diferencia física y de ritmo, aspectos que Estados Unidos suele dominar en este tipo de encuentros.
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Aun así, la escuadra nicaragüense confía en su disciplina y en la cohesión que ha venido construyendo en los últimos años. El público, por su parte, será clave para acompañar este desafío histórico que pone a Nicaragua en la ruta directa hacia los grandes escenarios del baloncesto mundial.
Una cita para hacer historia
La FENIBAL reiteró su invitación a los aficionados a llenar el Polideportivo Alexis Argüello el próximo 28 de noviembre, y a vivir una auténtica fiesta deportiva.
Más allá del resultado, este encuentro simboliza el crecimiento y la ambición del baloncesto pinolero, que busca consolidarse entre las naciones competitivas del continente americano.
“Este tipo de partidos nos ayudan a crecer y a mostrar que Nicaragua puede competir con respeto y orgullo en cualquier escenario”, concluyó Fornos.
